El viernes pasado mi
amiga Mamen celebró una cena para las amigas. Brindamos por nosotras
(porque somos las mejores) y nos entregamos nuestro regalo de amigas
invisibles navideño. Tenemos una forma muy guay de hacer el “amigo
invisible”. Nos regalamos cosas propias, nuestras, sin comprar
nada, sin gastar dinero. Siempre se tienen cosas maravillosas que no
se usan y que pueden gustarle a una amiga. Me tocaron unos pendientes
preciosos. Yo regalé un echarpe.
En el transcurso de la
cena alguien habló de algo que no consigo recordar porque me tomé
varios vinos y tengo alguna que otra laguna mental. No recuerdo el
asunto pero sí recuerdo que Mamen dijo: "Eso lo tengo en mi lista de
52 cosas para hacer antes de morirme". El asunto me despertó mucho
interés. Tiene una lista de 52 cosas pendientes y cuando cumple una
la sustituye por otra. Eso no lo entiendo. Ella dice que así la
lista siempre tendrá 52 elementos y no se morirá nunca. Yo más
bien pienso que se va a morir con 52 cosas pendientes. Tampoco
entiendo por qué ha elegido ese número, 52, un número tan poco
redondo. Pero es su lista y son sus normas.
Como la idea me entusiasmó he hecho mi propia lista. En ella también he
reflejado las cosas que ya he cumplido y que formaron parte de mis
propósitos en su momento. Estas las he señalado en color rojo. A
día de hoy he realizado ya 21. Me faltan 31. No tengo tiempo que
perder.
1. Hacer un curso de alfarería.
Esto es lo primero que se me viene a la mente cuando pienso en cosas
pendientes. Algún día llegará.
2. Conocer Petra.
3. Conocer Buenos Aires.
4. Ir a las cataratas de Iguazú.
5. Leer Cien años de soledad.
Sé que es una grandísima obra de arte y me la estoy perdiendo.
6. Ver todas las películas de la
Guerra de las Galaxias. Y eso que creo que no me van a gustar.
7. Montar en
globo. Hace varios años
sobrevolé Aznalcollar y aledaños. Me encantó la experiencia.
8. Tener un
blog. Helo aquí.
9. Tener un
hijo. Helo aquí también.
10. Comer
caracoles. De esto no hace ni una semana. Una vez
cocinados no son babosos como piensa la mayoría de la gente. Con una
salsa picante están realmente ricos
11. Probar el
mate. Qué chasco. No me
gustó nada. Creo que es la única infusión que no me gusta.
12. Trabajar
como voluntaria. Experiencia muy, muy, muy
recomendable. Debería ser obligatorio realmente. Hay voluntariados
con niños, ancianos, animales, pro-medio ambiente. No dejéis de
hacerlo.
13. Asistir a un concierto de música
clásica en Viena.
15. Aprender primeros auxilios.
Cualquier día pasa algo y no me pilla preparada.
16. Aprender a
bailar tango. Lo he intentado y me gustó. Debo retomar
este tema.
17.
Donar sangre.
18. Participar
en una obra de teatro. Lo último fue un musical casero en
el que yo hacía de cirujano loco.
19. Escuchar fados en el barrio de
Alfama de Lisboa
20. Vestirme
de novia. Todas las niñas
idealizamos ese momento. Después te das cuenta de que no es para
tanto.
21. Hablar después de haber
inhalado helio. Como la pitufina.
22. Ver una representación del
Circo del Sol. Oportunidades he tenido y por unas cosas o por
otras...
23. Pasar Fin de año en un lugar
exótico
24. Montar a caballo. Y
desmontar enseguida, que me da miedo que pille velocidad.
25. Aprender a tocar un instrumento.
Sólo probé con la flauta dulce en el colegio. ¿por qué se llama
flauta dulce? ¿Hay otra flauta amarga?
26. Dormir al
aire libre. Lo hice con mis
amigos Jose y Mariluz hace varios años. Era primavera, pero a partir
de las cuatro de la mañana hacía un frío... No pegué ojo.
27. Hacer un cocido. Jamás lo
he hecho. Ni cocido ni fabada. Lentejas sí.
28. Ver las Fallas y Ninots de
Valencia. Verlos antes de que los quemen y luego pirarme, que se
monta mucho follón y a mí no me gustan las fiestas desmadradas.
29. Inventar algo. Tengo una
idea sobre un reloj infantil que marque con símbolos las horas de
comer, dormir... No sé si llegaré a darle forma al asunto. En una
ocasión inventé los sujetadores de silicona, pero mientras yo los
inventaba ya se estaban vendiendo en los chinos. Qué fracaso.
30. Pintar un cuadro
31. Ir a un zoológico. En
cuando mi hijo tenga dos o tres añinos más, vamos a ir al de
Lisboa.
32. Ir a Eurodisney.
33. Asistir a un concierto de Bruce
Sprinsteen. Seguro que mi amiga
Ana quiere acompañarme.
34. Organizar una fiesta de
disfraces para mis amigas.
35. Probarme un sari indio. Y
pintarme el puntito ese entre las cejas.
36. Conocer Amsterdam. A ver si
este año por fin.
37. Bañarme
en el balneario Gellert de Budapest. Uauuuu. Se adjunta
foto.
38. Subir a la
Torre Eiffel. Dos veces. La
primera vez era estudiante y subí andando. La segunda vez ya era
solvente y subí en ascensor. Mucho mejor, dónde va a parar.
39. Visitar la
capilla Sixtina. Dos veces también.
40. Comer una
pizza en las escaleras de una bonita iglesia toscana.
Hummmm. Qué momentos.
41. Visitar una gran bodega de vino. Algunas de ellas tienen diseños arquitectónicos
fabulosos. Me gusta la de Protos.
42. Ordeñar una vaca. Creo que
tiene su técnica. Quiero intentarlo
43. Asistir a
un parto. Asistí al de mi
hijo porque no pude escaquearme. Hubiera preferido asistir a otro que
me doliera menos pero no fue posible. También asistí al de una vaca
hace varios años. Fue muy emocionante. Llamaron a la ternerina Rosa
en mi honor.
44. Conocer el Museo del Prado.
Vergüenza me da reconocer que no he ido nunca.
45. Bañarme en el mar muerto.
46. Patinar
sobre hielo. En Bradford,
Inglaterra. Mucho más fácil que sobre ruedas. Lo difícil es
frenar.
48. Hacer un curso de Restauración
de muebles.
49. Apuntarme
a clases de Tai-chi. No me gustó. No soy capaz de
realizar movimientos tan lentos. Los que me conocéis sabéis que soy
muy impaciente.
50. Hacer un curso de yoga. Creo
que voy a tener el mismo éxito que con el Tai-chi, pero lo
intentaré.
51. Bailar
Danza del Vientre. Pues no se me daba demasiado mal.
Indispensable la faldita de monedas. ¿Dónde habré puesto la mía?
52. Aprender a
bailar sevillanas. Lo intenté. Mal, muy mal. No pasé de
la primera.
¿Y vosotros?¿Os animais a hacer vuestra lista?
ROSA
Ahora entiendo tanta preguntita mañanera!! pues todo venia porque esa noche taché con vosotras una cosa de mi lista...hacer croquetas y encima eran buenas y bonitas (palabras de Belén). Aclaro que son 52 porque fue el número que me salió la primera vez que la hice, y sí quiero vivir eternamente y no dejar de probar hacer cosas nuevas (no siempre es recomendable). Gracias una vez más por este guiño. Desde aquí me ofrezco a acompañarte a cumplir alguna de las tuyas, si quieres te hago de guía en Buenos Aires, a gastos pagos eso sí. Mamen
ResponderEliminarBUENIIIISIMO, no se me va de la cabeza esa imagen tuya en medio de la pista de hielo, faldicorta y enigmatica, concentrada con tu tecnica de Tai-chi, antes de arrancarte por una mezcla de sevillanas-danza del vientre-tango, por toda la pista de hielo, en Amsterdam. MEMORABLE...
ResponderEliminarCreí que le sacarías punta a lo de ordeñar una vaca, la verdad. Llévame a Amsterdam este año y te demostraré lo que es un buen giro de ángel con doble carpado. Me tengo que comprar un maillot con faldita de tul. ROSA.
EliminarQué ratito más divertido has pasado a mi costa visualizándome, c*br*nct. ROS.
EliminarUfff... que feo salgo con esos dientes, tengo que ir a Cirilo...
ResponderEliminarJajajajajajajaja... Esto sólo lo entendemos los de la familia. ROSA
EliminarDebes ser una mujer muy feliz...tu lista lo dice. Me animaré a hacer la mía. :) Sil
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