Previsión metereológica:
Sábado 6: SOL (Bieeeeen!!!)
Domingo 7: SOL ESPLÉNDIDO (Yujuuuu!!!)
Lunes 8: SOL ESPLÉNDIDO (Hurraaaa!!!)
Martes 9: SOL (Oleeee)
Miércoles 10: Huevo frito (Pichí, pichá)
Jueves 11: Huevo frito (Uyyyyy)
Viernes 12: SOL ESPLÉNDIDO (Oé, oé, oé, oéeee)
Sabado 13: Nubes (Ooooooh)
No está nada mal. Al contrario, está muy requetebien. Preparada pues para la playa. Tengo que comprarme una toalla del Decathlon de esas finitas que con todos los trastos del crío (cubo, pala, rastrillo, regadera, moldes, camión transportador de arena, bañadores, pañales acuáticos, plasta de protección 50, varias camisetas, gorra...) necesito espacio en la mochila. Voy a parecer un sherpa. La crema ya me la he comprado, de marca Hacendado, a ver qué tal. Bikini este año no me compro. Como es una prenda que odio tengo los mínimos indispensables, uno, y con el dinero que me ahorro me compro otras sandalias en las rebajas. No se me puede olvidar el cargador del móvil. Las amigas ya saben el día que llego y hasta cuándo me quedo. A alguna le he tenido que repetir las fechas veinte veces (ejem). Ya tengo planes con ellas: comidas de fraternización, cenas de fraternización, vinos (con esos se fraterniza mogollón) y alguna excursión. Lo mejor, que mi amiga “la de Tenerife” también va a estar allí. Sólo nos vemos una vez al año y toca ahora. Ay por dios, que no se me olvide el cargador del móvil. Cuando me reencuentro con mis amigas siempre alucino con lo mismo: sus hijos miden un palmo más y ellas siguen igual de estupendas. Tengo que adelgazar dos kilos en las próximas 24 horas que también quiero que me vean estupenda. Les apetece que hagamos un viaje en tren a algún pueblo cercano porque sus hijos han estudiado en el cole el ferrocarril y tienen ganas. Por mí genial. Al mío también le gustan los trenes, sobre todo las locomotoras de Chuggington. Le he comprado tres: Coco, Bastian y Wilson, las protagonistas. Es que sólo costaban cinco euros cada una. Siempre hago lo mismo, como algo sea barato, lo compro por triplicado. Genio y figura. Como se me olvide el cargador del móvil... Me atormenta la idea de que se me pierda el niño en la playa. Tengo pesadillas. Sueño que estoy placidamente tumbada y oigo “En la caseta de salvamento situada en la escalera número 12 tenemos recogido a un niño de unos dos años que viste bañador de rayas y que responde al nombre de elbebé” Me despierto angustiadísima. No, seguro que no pasa nada. Le voy a incrustar un GPS en una muela, así me vale ya para cuando sea adolescente y empiece a salir. Se lo va a pasar pipa este verano haciendo hoyos en la arena y saltando olas. El cargador del móvil, el cargador del móvil. Verás tú como se me olvide. Todos los años hacemos también algo especial como ver un musical o ir a un concierto. No sé cual será el de este año. Sé que no debo hacer demasiados planes con esto de las vacaciones porque me creo muchas expectativas y no siempre sale todo como yo me imaginé. Da igual, es mi idiosincrasia. Soy como los alemanes, dejo muy poco al azar. Cuando viajo disfruto el doble: primero, organizándolo todo y después cuando ya me voy. Hago una lista enoooorme de las cosas que tengo que llevarme para acordarme de todo, pues aún así... No es que olvide algo de la lista, no soy tan absurda, es que no me acuerdo de apuntarlo. Ahora mismo voy a añadir las tres últimas cosillas que me quedan: libro electrónico, ibuprofeno y chanclas azules. Ya está. Este año no se me olvida nada.
Pues eso, que mañana me voy a Gijón.
ROSA
Bienvenida! Pérez...
ResponderEliminarPor dios!, recuérdame lo del cargador a mí también!, ya me falta poco para llegaaaaar! y a mí también me pasa lo mismo, que se me pierdan me dá algo...llamamiento social, y a los perros se les pone un chip obligatoriamente, ¿porque no nos dejan ponerle uno aunque sea chiquitito a los neneeeees????.Sandra, la de Tenerife.
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